“Nada ni nadie es la poesía,
pero ella es quién me salva de este monstruo
que acecha en un lugar dentro de mí,
la bestia que me hace compañía.”
Joan Margarit
No suelo frecuentar
Jornadas o ateneos literarios
Ni círculos poéticos;
O, mejor dicho, nunca los frecuenté en mi vida.
Pocos poetas conozco en persona,
Y antes que por poetas
Yo los tengo por amigos; mi mundo
Es el de las tabernas y las calles,
Y allí me relaciono
Con los taxistas y los fontaneros
Con los albañiles y los peones
Que por una miseria recolectan la fresa,
Con parados de larga duración
Y con algún obrero del montaje
De las sucias fábricas que, sin alma,
Nos hurtan nuestra vida de soslayo
En esta Huelva de gases y yesos
En nombre del progreso sacrosanto.
Casi ninguno leyó un solo verso
De Delmira, Cernuda o Alfonsina,
Las rimas de Gustavo Adolfo Bécquer
O los sonetos del gran Blas de Otero.
Nuestras conversaciones
Suelen versar sobre fútbol, sucesos,
Programas del corazón, Grandes Premios
Y acerca del magnífico trasero
De la hermosa mujer del carnicero.
Pero todos ellos tienen sus manos,
Su voz y su mirada,
Su vida cotidiana,
Colmados de poesía.
12 comentarios:
Hola primo.
Guapísimo poema-canto a la sencillez, a la proximidad de tus entornos, de tus amistades.
Abrazo cotidiano.
P.S.: Yo tampoco estuve nunca en un sitio de esos que dices (aunque me invitaron...)
Porque la poesia siempre está al alcance de la mirada...y en toda la cotidianeidad entera.
Precioso.
Un abrazo
Ya te has respondido tú mismo, querido poeta, poesía es ese tabernero, taxista, fontanero, albañil, peón...sobre todo estos últimos lanzan unos "versos" desde el andamio que "te cagas", je je
"Azí" es como es, niño, poeta del asfalto, si a tí con sólo mirar ya ves estrofas por "to" los sitios, ¡qué criatura esta!
Muack
lindo, Rafa y "mu" underground
Rafa, caro amigo, lo mismo te pegas a la tierra, esa que tanto amas, que te diluyes en mil formas que sólo la poética puede recomponer.
Creo que es hora de que tomemos unas cervezas. Yo, al menos, lo estoy deseando.
UN ABRAZO
Pues a mí me da que, quitando unas cervezas, el fútbol y las riquezas de los culos de las mujeres, no tienes relaciones, ni idea de lo que es la clase obrera. Porque si mezclas fontaneros y albañiles con los obreros de las fábricas o los peones, Rafita, no tienes ni idea, sólo eres idealista. Los fontaneros y albañiles de ahora son millonarios, aunque vayan con el buzo a trabajar y viven en chalets de 200 millones de pesetas, jajjaja. No estás al loro.
Un beso de una obrera.
Es la bella forma de encontrar poesìa de la que gozan unos pocos.
Me alegro por vos, porque tengas esa mirada sencilla ante las cosas.
Va un abrazo y un beso, Rafa
Vaya, estaba seguro de que serías un hombre dedicado a las letras, escritor quiero decir, o algo relacionado.
El relato que has escrito es precioso... colmados de poesía. Creo que muestra tu alma profunda y nostálgica.
1abrazo fuerte, Rafa.
Eres tú, es la respuesta que me parece recordar, :). Donde estén esos amigos está la belleza, y por tanto, la poesía. Parece un post del diario visto por un poeta, un abrazo
Excelente reflexión. Una cosa es el que escribir poesía a través de lo vivido y otra esa pedantería que por ahí flota en ciertos ambientes literarios.-
El mundo es la calle, la vida lo simple.....
un abrazo
El camino de lo sublime debe de estar enlosado con pequeñas historias, con momentos intrascendentes, con recortes de vidas medianas, tal vez, incluso, con un mosaico de mediocridades, pero eso, ¿a quíen le importa...?.
No siempre la materia prima de un verso se recolecta por encima de las nubes.
Un par de birras.
Tus ojos, poeta, ven la poesía.
Tu sangre la navega
Tu corazón la palpita
Tu garganta la grita
Tu alma la libera
Un abrazo.
realista como la vida misma. Castilla Center
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