Esta senda sin rumbo paso a paso,
destinada a esa sima del olvido
que transforma en quimera lo vivido
tras la última caída del ocaso,
ha quedado varada en el fracaso
que brotó de un afecto prohibido.
Y condena al silencio su quejido
de fantasma que vaga con retraso
por el tiempo que resta tan escaso
para ser del estigio un sin sentido,
que se queda del llanto poseído,
vertiendo su dolor sobre el parnaso,
por haberse entregado en su inconsciencia
al cadalso que embarga su existencia.
7 de enero de 2007
6 comentarios:
Pero, Rafa, cuando de verdad entregas tu corazón a alguien no valoras los pros y los contras. Te lanzas en sus brazos y el mundo deja de existir. ¡Bendita locura la de los amantes! Besos.
Nada está fuera de tiempo, sólo la muerte.
mejor apago un ratito, un 'amigo' ha sufrido un infarto y estoy ¿cabreada?
puede.
Un beso.
Y yo que creía que el románticismo había muerto. LLegar con el amor hasta el sin vivir.
Me gusta el consejo de María , es sabio.
Tremendo soneto-
Un saludo
Sandra
Muy bueno, ecos clasicos, ¡que mejor piropo!.
Por Estigia pasaremos y no olvidemos la moneda para comprar el paso. Un simple moneda en nuestro ultimo vestuario.
Un abrazo.
Sí, malena, bendita locura cuando es correspondida.
Creo que tienes razón, maría, pero no todo el mundo opina igual. Espero que tu "amigo" se encuentre mejor.
Gracias, sandra, ya sabes lo que dijo Bécquer -más o menos- podrá no haber poetas pero siempre habrá poesía.
Sí, prometeo, que los que olvidan la moneda se quedan vagando eternamente por la orilla. Gracias.
Abrazos.
Sí, Rafa, está mejor y he pensado quitarle las comillas porque aunque él me vea como un adorno y se olvide de que soy persona, ayer me di cuenta de que le quiero mucho.
Un beso.
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