viernes, 2 de diciembre de 2011

Un médium un poco verde


Te invoco a esta sesión de espiritismo,
que mira que estás buena aunque fantasma,
con ansias de meterme en tu ectoplasma;
soy puro, ya lo ves, romanticismo.

Me aturde tu respuesta, flor de abismo.
¿Que mi proposición no te entusiasma?
¿Que soy, más que poeta, cataplasma
sin lírica y aun menos virtuosismo?

¿No has visto estos cuartetos, su ardua rima?
¿El ritmo sin igual de este terceto?
¿Que en ellos la pasión no se escatima?

Verás, en acabando este soneto,
te saco, casquivana, de tu sima,
y juro por Satán que te la meto.

1 comentario:

Vivian dijo...

Acabo de llegar de viaje, estaba trabajando en otra ciudad, y vine a devolverte el beso. Me hacía falta, hoy me ha pasado de todo, me picó una abeja y se me hinchó una mano, perdí el talonario de recibos de la empresa, fui a un puente a sacar una foto y había un pájaro malo que tenía un nido (bue, no era malo, pensó que le iba a hacer algo a sus pichones) pues me persiguió por toda una línea del ferrocarril tratando de picarme la cabeza, ahora fui a abrir el Word para escribir el comentario y resulta ser que caducó desde la compra de la compu. En fin, que lo único bueno del día es este soneto…jajá, siempre lo he dicho, las sesiones de espiritismo suelen tener finales inesperados. Me has descolocado jiji.
Hay una canción cubana que se canta para invocar al muerto así éste baja y dice…

Si la luz redentora te llama buen ser
Y te llama con amor a la tierraaaaaa,
Yo quisiera ver a ese buen ser
Cantándole así al divino Miguel (o Manuel, ya no la recuerdo)
Anda buen ser, avanza y ven, que el coro te llama y dice VEN.

A mí me encantaba escucharla, ya sabes que tengo cierta afinidad con los muertos. Ahora me voy, me tomaré una cerveza a ver si relajo tensiones.
Más besos Rafita.