miércoles, 14 de diciembre de 2011

Disyuntiva



“y me invade en las horas amarillas
y me deja una dulce sed doblada.”

Idea Vilariño


Y si el dolor me dobla sobre el vientre y se pudren los sueños en mi estómago y de náuseas me ahogo y me retuerzo y entre aullidos vomito la esperanza y el vértigo me abate contra el suelo y me abro con el golpe la cabeza y escribo con la sangre derramada tu nombre y apellidos en mi pecho y te sientes al verme así culpable por tu inocencia alzándose en muralla y no hay juez que te absuelva o te condene y de dolor te doblas sobre el vientre y se pudren los sueños en tu estómago y de náuseas te ahogas y retuerces y entre aullidos vomitas la esperanza y el vértigo te abate contra el suelo y te abres con el golpe la cabeza y escribes con la sangre derramada mi nombre y apellidos en tu pecho y al verte así me siento yo culpable por mi inocente afán a uñas y dientes y no hay juez que me absuelva o me condene y de dolor me doblo sobre el vientre y se pudren los sueños la esperanza y muerto en vida muero y te me mueres.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pareces estar a gusto con tu prosa dolorosa y nihilista. Yo, que soy más optimista por naturaleza, admiro la riqueza de léxico que has desarrollado con este estilo tan personal, pero me gustaria leerte más llevadero para el alma.