martes, 27 de febrero de 2007

Tus ojos



Cambio poemas malditos
(No supe escribirlos cándidos)
Por un suspiro en tus labios,
El silencio que enmudece
Por la saudade de un fado
(No canto del todo mal
Y además salgo ganando),
Las ilusiones y sueños
Por despertar a tu lado,
Mi sortija de oro azul
Por unos besos de saldo,
¿Quieres mi vida también
Por mi alma en tu regazo?
Si la quieres,
¡Te la cambio!
El desamor que me habita
(No existe infierno más triste)
No lo cambio,
Lo regalo.
¿Tus ojos? No tienen precio
Ni son míos
Ni los cambio.

17 comentarios:

Anónimo dijo...

Campeón, acabo de imaginarte tumbado bajo un bananero, con una lata de cruzcampo a un lado y un cenicero al otro, como un Robinson Crusoe de "todo incluido". Eres un genio titi, de verdad de la güena, este poema te ha salido de un lorquiano que embelesa. Me quito la boína maestro.
Daikiris y vesos.

Anónimo dijo...

Qué natural te ha salío, y hasta ... graciosillo.¡Mira tú!
Fdo.: Esa, la pesá.

Anónimo dijo...

Qué natural te ha salío, y hasta ... graciosillo.¡Mira tú!
Fdo.: Esa, la pesá.

Anónimo dijo...

Rafa:
Una preciosidad
el poema llega como "ola melodiosa cargada de espuma y viento", pues sí, por "muy cursi" que te pareciera...... Lo dejaré remansar...de respuesta te ofrezco mi silencio, como un descanso de voces y voces y voces...

Anónimo dijo...

Pues yo digo que eres poeta, mal que te pese.

Anónimo dijo...

Manolo, dejate de quitar boinas y traete unas latitas de la cruz "pa" mi isla, que anoche acabé con las existencias.

Paquita, por mucho que lo repitas dos veces no lograras convencerme de que eres una "pesá".

Marta, veo que sigues muy "viva", y tan insistente como siempre. Pues, una vez más, gracias, y ya lo discutiremos el día 6 en Trigueros.

Y vos... estoooo... jo, con los puntos suspensivos, que digo que siempre es preferible una Babel confusa -que no es el caso- a encerrarse en una torre de silencio ¿no? Hace ya mucho que estoy engnchado al aroma a dama de noche y azahares de Triana, esa es mi otra patria, me gusta pasear por sus calles. Así que, si la Luna es propicia...

Abrazos

Anónimo dijo...

Ohhh!, mencionaste fado, me encanta. Sabes que hay una cantante buenísima llamada Mísia que es una delicia. Tiene un repertorio de fado de grandísimos poemas de poetas portugueses del pasado, su voz es exquisita, una delicia.con un arrebato de sentimientos que afloran, ufff,...Indescriptible. Entre ellos hay uno compuesto por Joao Mongue titulado Dos lunas que trata de la historia de dos amantes que se buscan desesperadamente y que nunca se alcanzan como dos lunas en el firmamento...

Cariñitos.
Victoria

Anónimo dijo...

Victoria, el fado, como el tango o la soleá, es patrimonio del alma. A Misía, no la he llegado a escuchar -pero como confío en tu buen gusto, habré de hacerlo- pero raro es el día que no me deleito con algo de Dulce Pontes, Cristina Branco o Mariza. O, cómo no, de Amalia Rodrigues. Es una maravilla ser revolcado por esas olas de saudade.

Abrazos
Rafa

Anónimo dijo...

Lo del silencio no es encerramiento en ninguna torre, es que ¿Qué se puede escribir después de leer ese poema, que llega como una aguja a traspasar la fina capa de mi piel?, a veces echo en falta una coraza de quita y pon, aunque fuera, para no sentir más de la cuenta.
Sobre los puntos suspensivos, y otras autodenominaciones, hay también una explicación, sólo que no puedo dártela....

Un abrazo

Anónimo dijo...

"Las ilusiones y sueños
por despertar a tu lado"

¿Hay una declaración más hermosa que ésta?

¡Disfrutas de un gran privilegio por poder expresar así, por poder sentir así!

Anónimo dijo...

Siguiendo con el asunto apuntado por Victoria yo me apunto y también te recomiendo MIsia, sobre todo un album llamado "a garra dos sentidos", un autentico orgasmo para el espiritu, orgasmo lento, levitativo, de esos que invitan a extender unas sábanas encima de las nubes. No dejes de oirlo.
Lo de las birras va en camino, con tapita de huevas aliñás y regañá.
Ron caribeño y besos

Anónimo dijo...

Bueno, nunca me ha gustado pedir ni dar explicaciones, además, es cieto, habitualmente no suele haber explicaciones satisfactorias, por aquello, sí, del libre albedrío. En cuanto a las declaraciones de amor, suelen ser mejores cuando se producen en silencio (el silencio, como casi todo, tiene sus cosas malas, pero también las tiene buenas), mirada con mirada, aliento con aliento... Las palabras, en ciertos casos, por muy hermosas que lleguen a ser, nunca alcanzan a tanto, y, hasta a veces, no siempre, sólo son muestra de una incapacidad manifiesta para amar y ser amado/a. El diálogo de dos manos unidas nunca podrá ser superado por el mejor de los poemas.

En cuanto al asunto Misia, os diré que he encontrado en mi isla los restos de un asentamiento pirata y me he colocado el parche en el ojo, el garfio y la pata de palo y me he lanzado a los mares virtuales que quieren secar los de la SGAE al abordaje del preciado botín, siempre, claro está, dispuesto a compartirlo, como Robin -¿o era Robín?, de los Bosques. Ya os contaré.

Ron, ron, ron la botella... y abrazos.

Anónimo dijo...

Eres el mejor de los piratas del golfo -el más golfo- de Cái. Yo también, quiero, bucanero, una copia de ese ron de Misia. Y por supuesto tus poemas. Éste, Rafa, es de los muy buenos. Norabuena.
María la portuguesa

Anónimo dijo...

A VICTORIA:

Victoria, me gusta la analogía que planteas entre las dos lunas y los amantes. Es verdad, la luna, satélite, siempre de un planeta, pero.... ¿qué pasa cuando satélite y satélite quisieran compartir trayectoria?... o planeta y planeta?...
Tendrían que aceptar estoicamente, la fatalidad de no compartir órbitas, sólo universo,y ¡ello sería tan insuficiente!, por muy ilimitado que éste sea.

Un abrazo desde "una compartida galaxia"

Anónimo dijo...

Yo no sé si tendrás mucho de María la portuguesa, pero de María la Yervabuena tienes un mazo.
...Y el que no diga ole que se le seque..., el ukelele.
Peaso tajá de Valdepeñas con lonshita de mojama.

Anónimo dijo...

"El diálogo de dos manos unidas nunca podrá ser superado por el mejor de los poemas".
Ese diálogo, fantástico cuando se produce, al minuto siguiente puede ser desolador, en cuanto se separen las manos y empiecen a funcionar los cerebros, los descerebros, te lo digo yo que lo he sufrío ¡cuánto doló diosanto!
Besos cándidos. PAQUITA

Anónimo dijo...

Sí, Paquita, pero en esta suma de instantes que somos -destindos al fin a dar como resultado el cero- ese momento, sin duda, merece la pena, y el riesgo es otra emoción más que de un modo u otro gratifica por el simple hecho de ser asumido.

¿María la portuguesa?, desde Ayamonte hasta faro... ¿Ana María la Yerbabuena?... Bueno, bueno... un día de estos tendré que escribir algo sobre mi pasión por la copla, aunque haya a quién le parezca cateto y decadente (yo no lo veo así, creo que en la copla hay mucha modernidad, mucho de vanguardia, mucho de poesía).

Abrazos.
Rafa