Ya sé que son de ceniza
Los pétalos de la flor
Que me obstino en alcanzar
Sobre el purpúreo magnolio.
Mas dejad que la imagine
Deshojarse en mis vestigios
Reconquistando el color
Antes que la arrastre el viento.
Sé también sin más opción
Que la tibia primavera
Ya no será de este mundo
Transido de intrascendencia.
Mas dejad que en el invierno
Entretanto llega el hielo
Siga soñando el calor
De la aurora en su lucero.
Ya sé que la lila azul
No habitará mi jardín
Poblado de crisantemos.
Más dejad que en su celeste
Alimente la esperanza
Del corazón macilento.
¡Dejadme, dejadme, sí!
¡No sofoquéis mi delirio!
Dejadme…
¡Soñar despierto!
Agosto de 2006
9 comentarios:
Te has lucido con el poema, ¡que brillante amalgama de colores en el!, sensaciones de color y olfativas en un desep inmenso.
Me ha dejado en una aire.
un fuerte abrazo.
Sigue soñando sensaciones!! Que yo las soñaré a través de ti!
Un beso
me encanto!!
Pues vaya "chuminá"...
¿A dónde vamos a llegar las y los soñadores con tantos sueños...?..
Precioso.
Un beso.
pd: hay anónimos que llevan firma...
Rafa, he decidido que me voy a tu casa y me pongo a tu ladito a escuchar de tu voz los poemas. Para tí será terapia poética para mí, creo que también.
Un beso muy grande.
sueña amigo, es lo unico que nadie nos puede quitar
y son sueños que nos ayudan a seguir alimentandonos de esperanzas
hermoso y sigue soñando
te dejo muchos cariños y que estes muy bien
mil besitos
besos y sueños
Si, es que se tiene la sensaciòn de escucharte recitar clara y firme cada palabra de tus versos y entregados en medio de un gran estremecimiento.
Van besos (s)oleados, Rafa
Pd: vuelvo presurosa a surcar las olas, o a encontrar algùn recodo o peñasco donde hallar el eco de esa voz.
que maravilla!!!!
un abrazo Rafa
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