No,
no es el otoño;
son esos sauces que, llorando
al son melancólico de una clepsidra,
van desangrándose a lágrima viva.
La flor del tabaco
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*(Pues si mata… que mate)*
*A Manolo Rubiales –echando humo.*
*Ayer noche, al quedarme sin tabaco*
*–Estaban los estancos y colmados,*
*Los quioscos...
4 comentarios:
No es el otoño, no.Pero la melancolía poética aflora...
Precioso
Un saludo y gracias por tu visita y tus palabras
tiempo de melancolia...
precioso
otro abrazo!
Éste me encanta, además la imagen del sauce llorón desangrándose me parece muy original, Un abrazo
Y esa sangre, savia verde,le hará rebrotar, ¡¡ estoy segura !!
¡¡ hay que bebérsela, con miel y canela, infusión invernal !!
Rafa, son lindos los sauces, no lloran, se acercan al suelo para acariciar la tierra
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