viernes, 30 de abril de 2010

Pruebas circunstanciales


LO QUE MÁS lamentó en aquel destierro fue no haber mordido la manzana.

1 comentario:

Alma dijo...

Nunca sabremos lo que podría haber pasado de haber hecho algo. Es duro cuando nos queda la sensación de y si...

Besos