nadie es profeta (digo
verdadero profeta)
en su tierra ni lejos
aun de su tierra en cambio
cualquiera (en un momento
de flaqueza) es capaz
de (abrazado a la fe
religiosa o pagana)
otorgar condición
de profeta al más zafio
de entre los más garrulos
y abyectos charlatanes
La flor del tabaco
-
*(Pues si mata… que mate)*
*A Manolo Rubiales –echando humo.*
*Ayer noche, al quedarme sin tabaco*
*–Estaban los estancos y colmados,*
*Los quioscos...
1 comentario:
Las palabras se las lleva el viento...
Hechos.
Honestidad y no latrocinios.
Buenos días.
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