Cada vez que, en cenizas,
Me vierto en un poema,
Entiendo un poco menos
Acerca de la vida,
Y mucho, mucho, más
Sobre el don de la muerte.
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lunes, 6 de octubre de 2008
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Cada vez que, en cenizas,
Me vierto en un poema,
Entiendo un poco menos
Acerca de la vida,
Y mucho, mucho, más
Sobre el don de la muerte.
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11 comentarios:
Pues yo hoy te regalo una sonrisa...
besos
Benditas cenizas estas tuyas, pues aún siendo cenizas queman el alma.
Es difícil entender esta vida… mucho, así que no te esfuerces, sólo déjate llevar por ella y de la muerte… de eso ya hablaremos otro día.
Un beso y un te quiero susurrado a media voz.
La muerte puede ser una redención pero siempre que no hayas tirado la toalla y hayas apurado la vida al máximo. Puede parecer una incongruencia, pero no lo es.
La vida, a pesar de todo, merece la pena vivirse.
Un beso.
Tus cenizas son esmeraldas.
Beso poeta.
Y es que la vida es tan complicada querido amigo, algunos dicen que muy sencilla, pues yo opino que no y la he vivido e intento vivirla a tope, pero no sé... tal vez los complicados seamos nosotros, o que le pedimos mucho, o yo que sé...
A mi tu vida me importa, y no me gusta oirte hablar de muerte, yo como Meriem también te quiero... un montón.
Tus palabras, como siempre, bálsamo para mi alma...
estoy dejándote algo en mi blog... pasate...
besos
La vida se nos escapa tan rapido... que pensar en otra cosa, que ya durara una eternidad, no me parece justo.
Un Beso grande.
Con este asustas Rafa. La vida es mucho más corta, aunque a veces nos parezca eterna, así que paciencia, paciencia, escribe, escribe, vive, vive, vive feliz.
Un abrazo.
Esto me recuerda aquello de la vida es una enfermedad que siempre termina con la muerte.
Muy interesante tu blog y en este escrito describiste una situación muy común en quienes hacemos, o intentamos hacer, poesía.
¡JODÍO GENIO...!
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