Aquel portarretratos
donde arraigué con mimo
la imagen luminosa
–la torre y las palmeras bajo el cielo
azul del mediodía,
las casas solariegas,
el coche de caballos
y, abajo donde nunca
alcanza la mirada,
el río y su furtivo
paseo de los amantes-
en la que quise siempre
tejer con hilos fuertes
la trama del futuro,
se ha quebrado de un golpe
montaraz contra el suelo.
Y ahora el agua estática
que poblaba de sueños
de acuarela mis ojos,
moribunda se vierte
sobre el mármol inerte
sitiada de cristales.
donde arraigué con mimo
la imagen luminosa
–la torre y las palmeras bajo el cielo
azul del mediodía,
las casas solariegas,
el coche de caballos
y, abajo donde nunca
alcanza la mirada,
el río y su furtivo
paseo de los amantes-
en la que quise siempre
tejer con hilos fuertes
la trama del futuro,
se ha quebrado de un golpe
montaraz contra el suelo.
Y ahora el agua estática
que poblaba de sueños
de acuarela mis ojos,
moribunda se vierte
sobre el mármol inerte
sitiada de cristales.
1 comentario:
Muy romántico y personal. Me imagino a la Maria Dolores Pradera cantando eso de "acuarela de mis ojos... sitiada de cristales".
Publicar un comentario