Mujeros, hombras y viceberzas

"Compañeras y compañeros del metal: en verdad os digo que eso de decir "portavoza" no deja de ser, aunque sin la menor trascendencia, una indiscutible tontería. Como una tontería, esta ya de bastante más calado, es venir a querer justificarlo con el argumento pueril de que hace unos años tampoco se decía "jueza" ni "médica" ni "tuit" ni "Operación Triunfo" ni "Perestroika" ni niño muerto que valga. Y si alguien se empecina en no querer entenderlo así, que se pague un buen máster de filología hispánica. Y, sobre todo, que se haga mirar a fondo los marcadores en sangre de los fundamentalismos, que ese es un síndrome que, de no detectarse a tiempo, puede terminar resultando de pronóstico reservado. Y fundamentalismos, qué duda cabe, también los puede haber relacionados con el uso y abuso de la palabra. Como, por ejemplo, ese tan rancio que reniega de la necesidad del buen uso del lenguaje inclusivo. Pero lo que es tonto, pero tonto de nativitati, pero tonto y tonto y tonto del culo hasta las heces, es andar por ahí y hasta el infinito y más allá, dando una y mil veces más importancia a la indolora patada al diccionario de Irene Montero, que al "somos sentimientos y tenemos seres humanos" de Mariano "El Padrino" Rajoy. Porque, por lo demás, a la honradez y capacidad de gestión del a la par actual President del Reino de España y de la República Independiente de Catalunya en ciernes no habría manera de ponerle pero alguno, ¿no? Y ahora, si así os place, llamadme secesionista, rebelde sin causa, facha opusdeico y perezrevertiano machirulo."

Tommy Nawo, falósofo inclusivo, y, en ocasiones, filólogo sarcástico con varias asignaturas pendientes.