No ha gustado al capital
que Elena Cortés pretenda
calificar la vivienda,
como derecho social.
Y es que la horda liberal
antepone su codicia
siempre a lo que beneficia
al pueblo, que lo separa
de la intemperie y lo ampara
frente al hambre y la injusticia.
Y el Gobierno Popular,
aplicado mamporrero
del sistema financiero,
en su afán por embaucar
al pueblo, viene a inventar
una misiva de Europa:
¿Cómo se atreve esta tropa
a poner en un aprieto
a la banca por decreto,
para dar vivienda y sopa?
Pues se atreve porque debe,
porque ya está bien, ya basta
de las tramas de esta casta
a la que nada conmueve
y, canallesca, promueve
la miseria y congoja.
Y si el fascismo se enoja
porque se puede y se fragua
otra manera, ¡ajo y agua!,
¡bravo por Cortés la roja!
1 comentario:
...Y bravo por nuestro Rafa,
ilustrado del terruño
que él a su manera labra.
Hasta los ciegos sin gafas
ven verdades como puños
cuando toma la palabra.
Tío Gus
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