Entre verso y verso de Blas de Otero,
Recuerdo mañanas de playa
En extintos veranos por el frío.
Y al mar lamiendo, voraz, las sordas huellas pretéritas
Que jamás alumbraron mi mirada,
Y dejando, como herida, en su lugar
Pisadas de sal y espuma
Sobre restos de algas muertas.
Rompe el azul la luna menguante,
Altiva frente al sol del mediodía,
Y ahogándose los pinos al mutismo caluroso del estío
Alzan sus copas al cielo para brindar por la brisa,
Cuarteto de sal y viento
Que pinta con su soplo entre las ramas
Sabrosas y silbantes melodías.
-Silencio: anda afónica la orquesta-.
Te voy a contar una historia de amar:
El mar mueve las manos como tú cuando te alejas,
Dejando mi playa en un yermo
Que nunca bebió de tu océano.
2 comentarios:
"Porque escribir es viento fugitivo,
y publicar, columna arrinconada.
Digo vivir, vivir a pulso, airada-
mente morir, citar desde el estribo."
Que leas a Otero nos pone algo en común.
Tienes don para los versos
además de música el poema, lleva la esencia de la playa de Huelva y la esencia de un poeta.
Un beso.
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