(Sodomía.)
Si te encuentras más cerca de shudrás, parias e invisibles que de la boca de Brahmá, jamás confíes, da igual que se diga de izquierdas o de derechas, en aquel político que prometa con vehemencia bajar los impuestos. Es seguro que, tras ese caramelito envenenado, esconde la libidinosa intención de bajar los pantalones a los empobrecidos. Y esa es una promesa que nunca dejan de cumplir los políticastros adictos al eufemismo.
Ya vienen los voxsonaros,
ya vienen los voxsonaros,
caminito de San Telmo,
olé y olé y Holanda, jodiendo,
jodiendo a tutiplén, tutiplén, tutiplén.
A lomos de sus caballos,
a lomos de sus caballos
'pátriotas' a to' meter,
olé y olé y Holanda y olé,
nos las van a meter,
a meter, a meter.
(De la serie "Menos samba e mais trabalhar." )
Si te encuentras más cerca de shudrás, parias e invisibles que de la boca de Brahmá, jamás confíes, da igual que se diga de izquierdas o de derechas, en aquel político que prometa con vehemencia bajar los impuestos. Es seguro que, tras ese caramelito envenenado, esconde la libidinosa intención de bajar los pantalones a los empobrecidos. Y esa es una promesa que nunca dejan de cumplir los políticastros adictos al eufemismo.
Ya vienen los voxsonaros,
ya vienen los voxsonaros,
caminito de San Telmo,
olé y olé y Holanda, jodiendo,
jodiendo a tutiplén, tutiplén, tutiplén.
A lomos de sus caballos,
a lomos de sus caballos
'pátriotas' a to' meter,
olé y olé y Holanda y olé,
nos las van a meter,
a meter, a meter.
(De la serie "Menos samba e mais trabalhar." )
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