“A través de los siglos
por la nada del mundo,
yo, sin sueño, buscándote.”
Rafael Alberti
Su nombre era el despojo
De aullidos desangrados:
Tan ancha era la noche
Y el canto tan menguado.
Hubiese alzado el vuelo,
Pero en su ala sin párpados
No era posible el sueño,
Su son petrificado.
Bajo un cielo plomizo,
Cementerio de pájaros,
Vagó durante siglos
Aguardando el relámpago
Que a un ángel alumbrase
En la estela de Lázaro,
Devolviéndole el fuego
A su salmo apagado.
Y la nada del mundo,
Negra sima de espanto,
Parió, muda, un demonio
Predador de milagros.