domingo, 19 de agosto de 2007

Al límite del éxodo


Como trompeta de Jericó, tú

Llegaste.

-------------- Mientras, yo,

Como tímpano atento al límite del éxodo,

Le iba abriendo las puertas a tu música

Con devoción pagana.

Mas tu estrategia de tierra quemada,

Barbarie que llega, arrasa y se va

Impuesta desde antiguo en los altares,

Te hizo nómada al viento,

Y una ruina cerrada, polvo al polvo en el frío,

Quedó desparramada en el silencio

Con un polvo azul prendido a los labios

Y atávicos anhelos de deidades.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

La orquesta de la luz – Tú eres el hombre

Anónimo dijo...

Gracias, Ely, amor, me ha encantado. No conocía a la Orquesta de la Luz. Luz y salsa, buen remedio para aliviar los tímpanos de las sombras de las trompetas de Jericó.

Un beso.

Anónimo dijo...

Sí, luz y salsa son un buen remedio para levantar el ánimo.

Japoneses triunfando en el mundo entero con una orquesta de salsa y no hablan ni papa de español, jeje ¡cómo son estos japoneses!

Besos, chiqui.