martes, 22 de octubre de 2013

Se me muestra de súbito en un sueño...

se me muestra de súbito en un sueño
y alumbra los rincones más recónditos
como si nunca hubiesen acaecido
las babas y la hiel de las tinieblas

pero del cielo emana
una fragancia añeja a cadáveres huérfanos
que lloran turbias lágrimas sin ojos
sobre la asfixia cósmica
de un arenal baldío

quiero decir que el cielo
ya no es cielo ni es aire ni es azul
es una risa cóncava
que me acecha severa con mirada de mantis

me duele el laberinto me zahiere
como la zarzamora como único asidero
frente a la intemperancia del diluvio
como carbón al rojo en la garganta
como una paz impuesta por los cáusticos
devotos del estrago y la caverna

me adhiero al resplandor igual que el náufrago
se abraza al parpadeo
alentador de un faro
pero esta luz es falsa un espejismo
que emula en el silencio
el esplendor de un cántico de anheladas sirenas
que ha mucho perecieron degolladas
por las esquirlas mórbidas del pánico
que transmudó el océano en distancia

deambulando en el lecho
de un piélago desnudo
Ariadna es un fantasma perdido en el azogue
de su inmisericorde y desvaída
abulia embaucadora

1 comentario:

Anónimo dijo...

poema pesimista con sueños inalcanzables