Cuando un político con ínfulas faraónicas y un arquitecto pijo se ponen de acuerdo para acometer un proyecto en común, este suele materializarse en ruinas para el pueblo.
La flor del tabaco
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*(Pues si mata… que mate)*
*A Manolo Rubiales –echando humo.*
*Ayer noche, al quedarme sin tabaco*
*–Estaban los estancos y colmados,*
*Los quioscos...
1 comentario:
De hecho, cúantas casas han dejado caerse y de rehabilitarse en Triana mientras que la Caja de Ahorros pertinente construía en su extremo un rascacielos para gloria de un cretino
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