martes, 24 de octubre de 2017

Orgullo y satisfacción


Las mafias del totalitarismo financiero ―sírvannos hoy de ejemplo las eléctricas (*)―, cuyas lujosas cavernas mantienen siempre abiertas y bien engrasadas un sinfín de puertas giratorias, saquean a los pueblos de España, los extenúan, debilitan el espinazo osteomielítico y herniado de una sociedad, la española, cada vez más insolidaria y cainita. No sería de extrañar que cualquier día de estos todo se colapse y se venga abajo como un castillo de naipes marcados, que un caos aún mayor se instale sobre el actual para quedarse, que España se rompa en mil pedazos por las múltiples fracturas de las que adolece. Porque, con o sin Catalunya, España ya está hace tiempo en ruinas. Y los débiles puntales sobre los que se aún se sostiene, no paran de crujir, se nos rompen.

(*) Nos dice hoy, 24-10-2017, el Diario de Navarra:

"LA LUZ DA OTRO SUSTO FORTUITO AL SITUARSE EN MÁXIMOS POR LA OPACIDAD DEL SISTEMA.

No han cambiado las condiciones meteorológicas tanto como para que se produzca un incremento.

Ni hace un frío extremo que impulse el uso de las calefacciones ni las condiciones meteorológicas han cambiado repentinamente como para que el precio regulado de la electricidad -el PVPC- repunte a sus cotas máximas del año en pleno mes de octubre. Pero este lunes sucedió: el coste de esa tarifa que utilizan 11,5 millones de hogares se situó en los 0,1825 euros por kilovatio/hora (kwh) entre las 19.00 y las 23.00 horas. Un tramo que coincide con un consumo intensivo en las viviendas, aunque al tratarse de un periodo tan corto, su impacto en la factura de octubre tendría que ser mínimo."

1 comentario:

Carlos dijo...

Habrán subido el precio por la cara, ya que no tenían la excusa del excesivo consumo por calor o frío. Y los beneficios deben mantenerlos, pues nos tienen cogidos por la energía de la que dependemos para casi todo...