martes, 24 de julio de 2007

Graffiti

(Ocaso y ensueño de un arrabal de Triana)


Justo frente a tu balcón

En el muro de las náuseas

Y el caballo que cabalga

Sobre plata no de ley

Pensé escribirte “te quiero”

Con el pronombre en inglés

Y el signo de un corazón.

(Menos mal que vino un perro

A orinarme en los zapatos

Recordándome aguaceros).


Quedó grabada en el suelo

Una mácula encarnada

Derramada en un latido

Por la lata de pintura

Que reventó de ladridos

Para mezclarse al orín.


(Sigue el muro, rojo sangre

Inmaculado al pecado

De un espejismo en la sombra

Que se quebró en la ventana).



Diecinueve de noviembre de 2006.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Con algunos poemas, me dejas tarambana.
ABRAZOS, RAFA.

Anónimo dijo...

No hay nada como un perro para devolvernos a la realidad, :), un beso

Anónimo dijo...

Está bien que le dediques algún poema a tu tercera o cuarta patria, la de la habitación estrecha de las siestas y noches sevillanas. Con estos versos el Príncipe de los Gatos "Junior" podría hacer un lindo rap trianero

Anónimo dijo...

Paco, creo que es de lo mejor que me han dicho de un poema mío. Éste, además, es de los que me gustan, que no son muchos.

Leuma, ni para mearnos los zapatos, jajajaja.

Carlos, tú sabes bien que, en mi corazón, mi primera patria, aunque adoptiva, siempre será Triana.

Abrazos.