domingo, 7 de agosto de 2011

La mazmorra (VIII)


turbio gusano del silencio oh tú
que habiendo bosquejado el espejismo
del verbo carne ungiendo el horizonte
devoras la palabra que me nombra
y mudada en estrépito la escupes
sobre los excrementos de la noche
oh tú bozal del verso
aparta unos instantes la mortaja
de hirsuta seda que ahoga el alarido
y deja que mi cántico alce en sueños
el vuelo hacía el crepúsculo cerúleo
que ondea sobre el fiel de la mazmorra

2 comentarios:

Estefanía dijo...

¡Qué no pare tu cántico!

Cada vez más me engancho.


Abrazos

Calma en días de tormenta (Darilea) dijo...

Atenta a tus mazmorras.
:) Un besito