- ¿¡Quién vive!?
- Nadie -respondió Omar, mientras abrazaba, sin fuerzas, el cuerpo sin vida de uno de sus compañeros de naufragio.
La flor del tabaco
-
*(Pues si mata… que mate)*
*A Manolo Rubiales –echando humo.*
*Ayer noche, al quedarme sin tabaco*
*–Estaban los estancos y colmados,*
*Los quioscos...
3 comentarios:
Precioso. PAQUITA
Y triste, Paquita. Desgraciadamente éstos forman parte de "los nadie" esos cuya vida, según Galeano, cuestan menos que la bala con que son asesinados. Algunos son asesinados, aún sin bala, sólo hay que abandonarlos al mar y a la mala fortuna de haber nacido en el lugar equivocado.
Un beso
Rafa
Im--presionante
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