Nunca antes se había producido una alegoría televisiva que expresase mejor lo que es España. Así:
―España: el futbolín. Y los irracionales "futbolinistas", al modo de peones de ajedrez o soldaditos de plomo, sus pueblos y ciudadanos. Unos peones que ―tiremos ahora de la prosopopeya― en su imbecilidad manifiesta, se piensan poseedores de las riendas de sus destinos, sabios y soberanos. Pero la realidad es otra.
-Rajoy y Bertín Osborne: los esbirros político y mediático ―un poder este, el mediático, que poco a poco, o partido a partido, ha ido, hasta casi borrarlos del mapa, sustituyendo a los profesionales de la cosa por manipuladores campechanos de postín... Raloy y Bertín, decía, los esbirros de las mafias del totalitarismo financiero, el verdadero poder, el poder en la sombra.
―La pelotita: esas mafias. Y el sistema. El salvaje capitalismo.
―La pelotita: esas mafias. Y el sistema. El salvaje capitalismo.
Y ahí tienen a los ciudadanos, creyendo que son los que deciden entre chutar y dar y a quién un pase, cuando son los poderes político y mediático los que tienen el control del juego, dirigidos por las criminales alimañas que anidan en las cumbres del poder económico. ¡Y otro gol del sistema! ¡Y ahora en propia meta! Y los soldaditos de plomo, carne en potencia de cañón y miseria en todo momento, abrazándose alborozados como vulgares y muy adinerados rompecueros.
1 comentario:
Lo que no cabía duda es que Rajoy maneja al futbolin español, hoy por hoy.
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