martes, 9 de agosto de 2016

Diáporas

Equipo olímpico de los pueblos ninguneados, saqueados, masacrados, puteados por el Imperio hasta las jodidas heces, y a cuyos ciudadanos, para más inri y salvo muy contadas excepciones destinadas a lavar imágenes y conciencias, se les niega el derecho humano al refugio. Es largo, pero más acorde con la espantosa verdad.

(COItus interruptus)

1 comentario:

mailconraul dijo...

¿Te refieres a la espantosa verdad de las olimpiadas y a la felicidad dopada de los pueblos?