jueves, 21 de enero de 2010

El mutilado (un poema de Gabriel Ferrater)


Ya sé que no le amas.
A nadie se lo digas.
Los tres, si nos ayudas,
guardamos el secreto.
Nadie más ha de ver
lo que tú y yo hemos visto.
De la gente y las cosas
que nos dieron su amistad,
el se esconderá
.
No volverá al café
que está para esperarte.
Vendrán meses con erre:
estará lejos de las mesas

de marmol donde os servían
las ostras y vino blanco.

En los días de lluvia,
no mirará el asfalto
donde os habíais visto
cuando a falta de taxis
teníais que ir a pie.
No abrirá más los libros
que le hablaron de ti:
ignorará qué dicen
cuando no hablan de ti.
Y sobre todo, puedes
estar segura, ni tú ni yo
sabremos dónde está.
Se irá confinando
por tierras muy remotas.
Caminará por bosques
oscuros. No le sorprenderá
la azagaya de luz
de nuestra memoria.
Y cuando esté tan lejos
que lo creamos muerto
podremos recordarle, decir
que no le amabas.
Ya no nos dolerá
saber que tú le faltas.
Será como un espectro
sin vida ni penar.
Como la foto macabra
de una Gueule Cassée
que adorna un escaparate
y no nos impresiona.
Pero ahora no digamos nada:
no alarmemos a nadie
mostrando la herida
sangrante y purulenta.
Démosle tiempo y olvido.
Callemos, hasta que nadie,
ni yo mismo, lo pueda
confundir aún conmigo.

Traducción de M.ª Àngels Cabré

5 comentarios:

Silvia Delgado dijo...

es un poema suave pero va quitandote el aliento, va demostrando verso a verso la crudeza disimulada.Precioso, ¿cuàl es el idioma original?

ralero dijo...

¿Verdad que sí, Silvia? A mi me ha encantado. El idioma original es el catalán. Aquí va.

Abrazos.

EL MUTILAT

Jo sé que no l'estimes.
No ho diguis a ningú.
Tots tres, si tu ens ajudes,
guardarem el secret.
Que ningú més no vegi
allò que hem vist tu i jo.
De la gent i les coses
que us han estat amics,
ell se n'amagarà.
No tornarà al cafè
que és fet per a esperar-te.
Vindran mesos amb erra:
serà lluny de les taules
de marbre, on us servien
les ostres i el vi blanc.
En els dies de pluja
no mirarà l'asfalt
on us havíeu vist
quan no es trobaven taxis
i havíeu d'anar a peu.
No obrirà més els llibres
que li han parlat de tu:
ignorarà què diuen
quan no parlen de tu.
I sobretot, hi pots
comptar, ni tu ni jo
sabrem mai més on para.
S'anirà confinant
per fons remots de terres.
Caminarà per boscos
foscos. No el sobtarà
l'atzagaia de llum
de la nostra memòria.
I quan sigui tan lluny
que mig el creguem mort,
podrem recordar i dir
que no te l'estimaves.
No ens farà cap angúnia
de veure com li manques.
Serà com un espectre
sense vida ni pena.
Com la foto macabra
d'una Gueule Cassée,
que orna un aparador
i no ens fa cap efecte.
Per ara, no ho diguem:
no trasbalsem la gent
mostrant-los la ferida
sagnant i purulenta.
Donem-li temps i oblit.
Callem, fins que ningú,
ni jo mateix, no el pugui
confondre encara amb mi.

Alma dijo...

Va abanzando en la crudeza del dolor verso a verso, es increible la sensación...

Desconocía a este poeta, buscaré algo suyo para leer más de él.

Prometeo dijo...

Gran poeta y gran poema, va introduciendonos como en una pesadilla tierna que se va dorando con el calor del ritmo y de ciertas repeticones...todo un descubrimiento.
Un abarzo.

Rafa dijo...

Recomiendo su libro: Les dones i els díes. Que es donde está este poema.

Saludos!