martes, 22 de diciembre de 2009

Dilución


La busca por la breña,
La vista tan cansada,
Que teme que si alcanza
A tientas a encontrarla
No sea más que un fantasma.

De súbito un espejo
Se enfrenta con sus ansias
Y acerbo le devuelve
La imagen de un vacío
Sediento en la maraña.

Y gime hecha jirones,
Cadavérica y parca,
La pupila rendida
Al saber que en lo cóncavo
Se abismó la esperanza:

Cerrándose a sus sueños
Puerta y puerta tras puerta,
Con alas de quimera
La muerte a la intemperie
Sus pasos sobrevuela.

Ilustración: M.C. Escher.

2 comentarios:

Eria.. dijo...

Que dura.

Piscis dijo...

"Sólo la esperanza tiene las rodillas nítidas... sangran". Juan Gelman

Que tengas un resto de día muy feliz.

Abrazos.