En la aridez del silencio,
como un oasis amargo,
permanece tu recuerdo.
La flor del tabaco
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*(Pues si mata… que mate)*
*A Manolo Rubiales –echando humo.*
*Ayer noche, al quedarme sin tabaco*
*–Estaban los estancos y colmados,*
*Los quioscos...
6 comentarios:
Lo fecundo que es el dolor.
(Te han contestado las muchachas de Canarias, las del eclipse)
Un abrazo. Me gustaría estar en la lectura poética de Trigueros que anunciásteis, pero, a veces, sí influye la distancia.
PAQUITA
En este día tan triste,
sin tarta de cumpleaños,
oscura luz de nueve velas,
aún, mi niño, te anhelo.
Gracias, Rafa.
Nos acordamos de ti, Paquita.
Victoria, precioso poema. De auténtico escalofrío.
Abrazos.
No es un poema, Rafa, más bien una continuación del tuyo,pero ayer lo sentí parte del mio.
Un abrazo.
¿Que me recordásteis? Algún día tendremos que vernos para hacernos la imagen física, que la otra la vamos plasmando por estos lares.
Un beso/abrazo. PAQUITA
Escalofriante y conmovedor poema Victoria, con permiso de Rafa, por supuesto.
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