lunes, 17 de octubre de 2011

Relatos verosímiles (12) (Carlos Parejo)


Mi hijo Recaredo, con sólo cinco años, me hace preguntas difíciles de contestar: ¡Papá, hoy me han despertado unos gritos a las cinco de la mañana¡ Y me he puesto a observar lo que sucedía en la calle.

Una pareja de jóvenes hablaban y cantaban en voz muy alta. ¿Por qué chillaban tanto si las calles estaban silenciosas? Y acto seguido pintaron con un spray en la pared cuánto se querían. ¿Por qué no se lo dijeron al oído, como en las películas?

Después, pasaron cinco muchachos grandotes y fuertes, vestidos de negro y con el pelo levantado como la cresta de los gallos. Dieron patadas a las papeleras y prendieron fuego en un contenedor de basura. Luego se pusieron a romper los espejos retrovisores de los coches con un bate de béisbol e hicieron caer las motos aparcadas en la acera. ¿Con quién estaban tan enfadados si no había nadie más?

Finalmente, antes de que llegaras han pasado cuatro muchachas llamando a los todos los timbres de los porteros electrónicos de las casas. Y no esperaron a que les contestaran, sino que salieron corriendo. ¿Si estaban perdidas y no recordaban dónde vivían, por qué huyeron y de qué se reían tanto?


© Carlos Parejo Delgado

1 comentario:

Milena dijo...

jejeje las preguntas de los niños son las más complicadas de contestar!!