domingo, 26 de junio de 2011

La ausente (LXIII)


tengo el alma en los huesos
la tengo hasta tal punto descarnada
que ya no me acompañan
siquiera los gusanos
en esta soledad a tumba abierta
cavada por la ausencia

3 comentarios:

Circe dijo...

¡Ay Poeta , cómo te entiendo !
¡ Cómo se agradece que una mano amiga entrecruce sus dedos con los nuestros en un tranquilo paseo, al atardecer !!!

Abrazos

Vivian dijo...

Me desmorono, y me deshago en cenizas cuando te leo Rafa…¡Qué manera de gustarme tus desgarros! (Desde lo poético)
Qué buena esa imagen.
Mis besos

Estefanía Martín Sebaquevas dijo...

Uff como has hecho que atraiga lo que nos parece triste o feo.
Simplemente genial.

en esta soledad a tumba abierta
cavada por la ausencia: ME ENCANTA

Abrazos