Y ahora, con el tiempo ya cumplido,
Te alumbra la ponzoña del azogue:
Tú, sombra cincelada en los andenes;
Yo, tren sin ocupantes a la nada.
Te alumbra la ponzoña del azogue:
Tú, sombra cincelada en los andenes;
Yo, tren sin ocupantes a la nada.
domingo, 6 de septiembre de 2009
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5 comentarios:
Terrible verdad? lo contrario de lo queremos o nuestros entido indica...un abarzo.
¡Qué de abarzo-s te envía Prometeo!
¡Qué mala soy... pero qué mala!
(ver otras despedidas -suyas, claro-)
Besos para ambos desde mi tren particular... nunca desde los andenes (salvo que no sea yo, sino una burda imitación, que hace su aparición, siempre, inesperadamente). PAQUITA
ANDANDO, ANDANDO... he llegado hasta Los Confines de este blog.
¿? Paquita
no hay sombra que cien años dure...
bueno, venga vale la tuya sí ;)))
(el emoticón de la sonrisa no entra)
un beso
Yo, fiel lectora ;).
Me gusta tanto como al verso que le busqué la sirena, sin embargo, no encuentro todavía una sombra cincelada en el andén, mientras la creo o aparece te sugiero leer "Mujer con alcuza" de Dámaso Alonso.
Feliz noche Poeta.
Abrazos.
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