jueves, 2 de enero de 2014

Cucarachas

Cuando Gregorio Samsa despertó y se percató de que se había transmudado en un enome, nauseabundo y, por lo venenoso, extraño ejemplar de cucaracha, temiendo que aquella metamorfósis lo hubiese asimismo trocado en dirigente del Partido Popular, sin poder resistir un sólo instante más tanto desasosiego y repugnancia hacia sí mismo, se encaramó a la ventana y saltó al vacío.

1 comentario:

Anónimo dijo...

kafkiano total, máquina