jueves, 3 de septiembre de 2009

Como humo en las tinieblas


Escarbo en los arcanos del poema
Buscando alguna albura, bajo un verso,
Que, intrépida, balsámica y blasfema,
Alumbre una razón del Universo.

De dios no puedo hacer credo ni lema,
La Nada es un pronóstico perverso,
Y errante y consumido en tal dilema
Como humo en las tinieblas me disperso.

Y todo confusión, garra y mordisco,
Destripo estrofa a estrofa la metáfora;
Y emerge con su sangre un basilisco
Que itera en sus pupilas como anáfora
Que es la única certeza un hondo abismo
De queda inercia y gélido mutismo.

1 comentario:

Caminante dijo...

Suena estupendo, ya sólo queda... que me entere de lo que significa:
itera y anáfora
Y... sí, las certezas son pocas, el abismo está ahí al lado, nos movemos muchas veces por inercia y el mutismo no es nada cálido... distancia, te deja frío.
Besos. PAQUITA