Yo también soy… fórmula, ya estereotipada, que usamos para, cuando una situación se nos antoja injusta, ubicarnos emocionalmente del lado del débil, junto al que está siendo explotado, privado de libertades o masacrado.
Así que hoy tocaría decir “Yo también soy palestino”. Pero no, no lo haré. En cambio diré “Yo también soy israelita”, yo también, hasta ayer, con mi silencio e indiferencia, he estado siendo cómplice del genocidio. Sí, hoy “yo también soy israelita”, el mundo entero es israelita –no digo sionista, digo israelita-… Pero ¡ya basta!, hoy, como ayer, sigo siendo israelita, pero no quiero seguir siendo cómplice de los asesinatos sionistas y, en mi condición emocional, hoy, de ciudadano de Israel, les digo a los asesinos que ¡ya basta! y exijo que éstos y sus cómplices internacionales sean juzgados y, de ser considerados culpables –algo bastante probable, si se consigue un juicio justo- den con sus repugnantes huesos en la celda de un presidio. Para lavar el insoportable peso de mis manos israelitas manchadas de sangre, y comenzar a hacerlo también con las manos de este podrido mundo manchadas con la sangre, las vísceras y el lamento de los inocentes de todas las Palestinas que existen sobreviviendo a duras penas de norte a sur y de este a oeste. Para comenzar a construir la Justicia...
Así que hoy tocaría decir “Yo también soy palestino”. Pero no, no lo haré. En cambio diré “Yo también soy israelita”, yo también, hasta ayer, con mi silencio e indiferencia, he estado siendo cómplice del genocidio. Sí, hoy “yo también soy israelita”, el mundo entero es israelita –no digo sionista, digo israelita-… Pero ¡ya basta!, hoy, como ayer, sigo siendo israelita, pero no quiero seguir siendo cómplice de los asesinatos sionistas y, en mi condición emocional, hoy, de ciudadano de Israel, les digo a los asesinos que ¡ya basta! y exijo que éstos y sus cómplices internacionales sean juzgados y, de ser considerados culpables –algo bastante probable, si se consigue un juicio justo- den con sus repugnantes huesos en la celda de un presidio. Para lavar el insoportable peso de mis manos israelitas manchadas de sangre, y comenzar a hacerlo también con las manos de este podrido mundo manchadas con la sangre, las vísceras y el lamento de los inocentes de todas las Palestinas que existen sobreviviendo a duras penas de norte a sur y de este a oeste. Para comenzar a construir la Justicia...
¡YA BASTA!
9 comentarios:
Y hoy sí he picado el segundo enlace y ¿sabes que hago? llorar.
Debo ser idiota porque lo sabía, sabía que no iba a poder con ese horror. La mierda (perdón) de las religiones, del fanatismo y de la locura; y los que sí pueden, ¿que hacen? Han cambiado de "color", pero no de signo.
Otro beso, ¡pero muy rabioso y lleno de lágrimas!
El anterior comentario (el eliminado) era mío, pero ininteligible; me había saltado la mitad de las letras y de las palabras, veía borroso todavía.
Yo también soy palestina, yo también soy israelita, yo también soy humana...y por lo tanto me duele lo que le pase a cualquier persona de cualquier parte del mundo. ¿Qué más da su nacionalidad, su historia, su color o su credo? ¿Qué más da los desencadenantes, o las razones internacionales? Lo más doloroso de este mundo es la crueldad de un ser humano contra otro, la falta de piedad, de sensibilidad. La maldad, en una palabra. Pienso que lo único que puede salvar a este mundo es que comience a ser un mundo más espiritual. Besos, gracias por estar ahí, Rafa.
Rafa querido, tú no me tienes que pedir perdón ni permiso para comentar lo que quieras, lo sabes.
Sí, ya sé que tenemos la palabra y algo de libertad para opinar, para protestar, para denunciar, PERO YO QUIERO PODER MÁS, yo quiero que eso acabe, mejor dicho, queno hubiera empezado!!!!
No creo en esa gentuza de políticos, curas, rabinos, locos suicidas, no creo en nada del este asqueroso mundo; me lleno de rabia y de impotencia; se me atascan las palabras (o me salen a borbotones, apelotonadas) y se me escapan las lágrimas como torrentes.
Tenemos la palabra, pero sólo la palabra, no el poder. Necesito calmar mi rabia para escribir con coherencia; sin embargo aumenta cada día...
Un besazo!!!! Lo intentaré (prometido).
Acabo de publicar, en números, la manifestación desarrollada en Madrid, desde antes de las 12 hasta pasadas las 2 del mediodía.
Entré porque quería decirte que vi ayer las fotos que pusiste. Son terribles, mucho más que terribles,y... resulta tan... estúpido -seguramente el calificativo no es el más apropiado- que el personal sanitario tenga que estar poniendo "parches" a las víctimas del "atropello" llevado a cabo por el gobierno de Israel, personificado en su ejército. Es tan aberrante, tan terrible, doloroso, inhumano,los niños, los niños parecen muñecos rotos, muñecos rotos llenos de sangre.
Es tan inmoral
Hoy en Sevilla, mientras caminaba en silencio con los manifestantes, sin saber o sin querer pertenecer a ningun bando,con la única bandera de la impotencia nublandome los ojos....que desolacion... y si sirviera de algo....
Un beso
Gracias, por la solidaridad, por la denuncia, por la empatía, por la rabia... gracias. De corazón.
yo también me empatizo con tanto dolo por el sufrimiento injusto. Ojalá todo se pudiera arreglar con el arma de la palabra, verdad? ojalá no uviéramos que ver tanto miedo en los ojos de los niños. Ojalá tanto desastre nunca fuera pasto de la cruda realidad. Un besito
Estoy contigo Rafa y con los que sufren...
Muchos besos
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