miércoles, 1 de febrero de 2012

Llamada perdida (III)


odio hablar por teléfono
no poder ver los gestos
la mirada
de mi interlocutor

odio hablar por teléfono
si no más casi tanto
ahora que nunca llamas-
como odio tu silencio
no poder ver tus gestos
tus labios tu mirada
sellados de desprecio
¿será porque son siempre
los ojos lo primero
que engullen los gusanos
del alma de los muertos?

3 comentarios:

Vivian dijo...

¡Qué final!
Cuando se espera una llamada que no llega el tiempo es infinito.
Excelente poesía Rafa, me gusta....y me gusta.
Besos

Vivian dijo...

Ringggggg....

Anónimo dijo...

Y hoy día más, millones de personas adictas al uso diario del móvil, y acostumbrándose a hablar con fantasmas humanos cuyos gestos y miradas no se ven, y creyendo que así están mejor comunicados que nunca. ¡O incomunicados?