domingo, 5 de agosto de 2018

Gente sencilla


En este mundo ahíto
de muerte y destrucción hay gente
sencilla que madruga cada día,


gente sin pretensiones, gente anónima
que trabaja y a ratos va de fiesta
y canta y llora y ríe y bebe vino
y se rebela y lucha
contra la bota hostil  "de fuerza y sinrazón"
que "rompe ensucia aplasta", gente
que al fin de la jornada
se va a dormir y lo hace a pierna suelta
porque no tiene cuentas pendientes con la vida.
Sobre ellos te dirán "no valen nada,
son insignificantes, prescindibles",
pero suyo será siempre el futuro.
Porque lo que ha de ser, todo lo que será
será siempre de aquellos
que con su esfuerzo y codo
con codo lo construyen.

1 comentario:

Carlos dijo...

Emotivo poema entre Machado y Blas de Otero. Bravo