miércoles, 30 de mayo de 2007

Pruebas de sinceridad

Nunca podré confiar plenamente en quienes desvían la mirada cuando me hablan ni en quienes no beben vino.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Sobre todo lo segundo, porque quien no bebe teme decir verdades.
Mucho vino y más vino.

Anónimo dijo...

Hola! pasé a saludaros y disfrutar un ratito de vuestra compañía. Primero me asomé a ver si estaba "la fiera" porque... toy estresadilla y no me conviene toparme con ella, que me remata..
pero no parece que estuviera cerca, porque, realmente kaimán no puede ser considerado tal, aunque igual ahora que se está enajenando... ¿qué es ese perverso "seguimiento" ?, se nos está transformando en algo impropio de su sensata condición de lúcido cocodrilo, a ver, a ver ejem..

A mí tampoco me gusta la gente que desvía la mirada cuando te habla, se me antoja escurridiza, es como cuando te dan la mano y notas algo flojo e inánime.. no, no me gusta, pero, a veces, esa mirada no se puede mantener por algunas razones extraordinarias, como cuando estás turbadita de amor...y te quemas en la intersección de tus-sus ojos...

Ay... bueno, lo cierto es que yo he cerrado los míos, que no desviado, porque lamentablemente no os veo; mientras escuchaba este lindo tema que colgaste de Natacha
que me ha sentado fenomenal y me ha destressado.

Abrazotes

Anónimo dijo...

er matusalen vale como animal de compañia?

Tu Mar

P.D.: tengo un blog mas profesional ;)

Anónimo dijo...

los que beben agua, mienten.
los que sudan vino, asienten.

Anónimo dijo...

¡Ole!

Más vino, cantinero

Anónimo dijo...

Recordais aquello de.. algo así como:

"me gusta el vino, pero , cuando veo el agua cristalina, cantarina, recorrienco la montaña..... más me gusta el vino..."

Si es que mucho borrachuzo hay por aquí, je je.

Abrazos

Anónimo dijo...

A mí me gusta el vipirivipipí
de la bota empinar paravapapá..
(habito en el Norte)
Y no desvío la mirada.. (bueno, a veces, soy muy vergonzosa..)


Un abrazo.

Anónimo dijo...

Del vino ... el bueno, poco y en compañía, mirando a los ojos, agarrando las manos, apoyando la cabeza, cogiendo del brazo, tocando ... ¡uy! que me parece que estoy "bebiendo" demasiado.
PAQUITA

Anónimo dijo...

buena conclusión Paquita, si señor.

Anónimo dijo...

SIGUIENDO A PAQUITA:

soltándose las palabras, abriéndose los corazones, los repliegues de la intimidad, tambaleándose el juicio,perdiendo el tino, apuntando directamente, aunque ya con poco pulso, a la diana de ese milagro que se despierta en esa mirada directa sin evasivas, desnuda, turbia de vid y de vida

Anónimo dijo...

Veo que esta nimiedad os ha empujado a empinar el codo, eh! Tenéis, pues toda mi confianza.

Abrazos.

Ps. Mar, ya sabes que el Matusalén pasa sin dificultades la prueba del algodón.

Más Ps. Milena, abre los ojos.

Anónimo dijo...

Cuanto más conozco a los hombres, más aprecio un buen vaso de vino