jueves, 10 de diciembre de 2009

La falacia


Nunca esperó, tras saltar, escucharlo gritar "te quiero".

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Si hubiera abrigado la esperanza, no habría saltado.
Me encantó.
Besos Rafita

Vivian dijo...

Todos los hombres son iguales...¡A la horrrca!