La flor del tabaco
-
*(Pues si mata… que mate)*
*A Manolo Rubiales –echando humo.*
*Ayer noche, al quedarme sin tabaco*
*–Estaban los estancos y colmados,*
*Los quioscos...
domingo, 7 de diciembre de 2008
Lo infranqueable
¡Quién fuese sangre de tu sangre, amor!
–Tu madre, alguna hermana, cualquiera de tus hijas-,
Para así, despojado del deseo,
Frontera infranqueable que se alza entre nosotros,
Poder permanecer siempre a tu lado
Temiendo nada más que al crudo instante
Que todo muda en polvo sin memoria.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
Que privilegio sentirse amado de esa forma, y suavizar la amarga renuncia con palabras tan dulces.
Abrazos
Me fascina cuando escribes así ;)... Un abrazo súper cálido Poeta...
Totalmente de acuerdo con Yohanna: me fascinas cuando escribes simpre, pero mucho más cuando lo haces así. Un besazo, Rafa
Tremenda lección de amor, incondicional y puro, admiro el texto porque yo jamás sería capaz de claudicar así, soy demasiado epidérmico.
Tortitas de nata y cafe con leche
Publicar un comentario