domingo, 27 de noviembre de 2016

Crónicas del Régimen (13)


Informadorzuelos patrios muy preocupados ante la posibilidad de que Anne Marine Le Pen pudiese llegar a gobernar en Francia, pero a los que se la pela que la ultraderecha de este lado de los Pirineos lleve varios años haciéndolo en España. ¿Por qué será? ¿Acaso también esto quedó atado y bien atado?

BONUS TRACKS

Limpiaos bien los oídos y escuchad, cabronazos: el pasado viernes negro ese de los mil pares de cojones, no compré un puto carajo. ¿Pasa algo?

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¿Qué es un eufemismo? Pues, por ejemplo, denominar "moderación salarial" a la serie de prácticas criminales hoy dirigidas a propiciar un injusto y brutal trasvase de rentas desde el bolsillo de los trabajadores a los de las mafias del totalitarismo financiero. Trasvase que lleva a que cuatro ricachones panzones y casi siempre ociosos sigan engordando su repugnante anatomía, en tanto gente humilde que se mata a trabajar apenas alcanza a sobrevivir en la más absoluta de las miserias.

Por su parte, una coartada falsa es argumentar que esas prácticas criminales son las que posibilitan la recuperación económica.

Ya otro día definiremos lo que es un hijo puta. Pero sólo de manera genérica. Y es que hay tantas o más especies distintas como de cucarachas. En el Banco de España, el FMI, gobiernos autonómicos, de España, Comisión Europea, parlamentos, consejos de administración de grandes empresas, tribunales de justicia...

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Dime cuán grande es tu gabinete de prensa y te diré lo vanidoso que eres.

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¿Confluencia? ¿Con Errejón? ¿Con Yagüe? ¿Con Lizárraga? ¿Por qué no mejor con Antonio Hernando, Verónica Pérez y Mario Jiménez? Al final nos terminamos socialdemocratizando. ¡Viva la Casa Común de la pseudoizquierda! Deberíamos pensar muy seriamente acerca de la posibilidad de cambiar de camello.

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Vete a tomar por cuera.

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Cada día que pasa me tocan más los cojones las declaraciones de ciertos políticos pontificando desde cuasi celestiales púlpitos acerca de sociedades de iguales, respeto hacia los trabajadores, mundos más justos, dignidad, la Biblia en pasta, el coño de la Bernarda y un sinfín de hipócritas etcéteras sin la menor sustancia, cuando luego, en la intimidad de las distancias cortas, se cagan en todo eso que proclaman a través de los gélidos vericuetos de las redes sociales o a ese calor "envanecedor" de las cámaras al que suelen ser tan patológicamente adictos.

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El monstruo de Franconstein.

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Después del viernes negro, vaya un sábado gris tuvimos. Y eso que, según los más desheredados herederos intelectuales de los hermanos Grimm, estamos saliendo de la crisis.

                                                            (parte meteoeconómico)

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Hashtag los webs de estuiterticia. En especial de la de la Matrix política.

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Hasta cierto momento guardé silencio. No un minuto de silencio. Simplemente silencio. No soy de lamentar hipócritamente las desgracias de aquellos que me resultan de algún modo despreciables. Pero de ahí a brindar con cava media un abismo. Y adentrarse en sus vericuetos nos sitúa al nivel o hasta por debajo de aquel al que despreciamos. Ni carcajadas ni lágrimas de cocodrilo. Esto hablé. Y me volví a mi silencio.
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"Los madrileños están pagando la amnistía fiscal a los evasores fiscales amiguetes del PP."

Cristina Cifuentes

(¿Que mi Cris no dijo exactamente eso? Bueno, pero seguro que lo pensó.)

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En la 1 de TVE impartieron hace unos días un máster de cardiología a cuento de la muerte de Rita Barberá (EPD). Yo es que lo flipo.




Ilustración: Víctor García Visa

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