no; unos que do re mí, otros que mí
fa sol. Yo digo que tararí, y sin
músicas digo yo que la dejen así,
que no la toquen, por favor. Y pido
otrosí con la venia que se dejen
de ortopedias, que tal que así con torre
y media mi manquita baila bonita
por malagueñas. Mas si fuera el caso
de hacer una demostración de estilo,
molar mazo, fardar kilo, marcarse
un puntazo y quedarse más tranquilos
podéis iros al carajo y ya de paso
a poner brazos a la Venus de Milo.
Texto e ilustración: Agustín Casado
Otra vez gracias, Rafa. Aunque creo que esta vez el sonetastro sonará críptico al lector no avisado, no malagueño. La Catedral de Málaga, llamada La Manquita, porque está inacabada a falta del frontis y una de las torres que luce mocha a su mitad, es objeto periódicamente del herético proyecto de acabarla, siendo así que su no terminación es debida a que los fondos de que se disponía para su acabado fueron desviados a apoyar al pueblo americano en su lucha por la independencia en la guerra que libraban contra Inglaterra en el XVIII. Una catedral libertaria, rara avis.
ResponderEliminarAgustín Casado
un viajero inglés, manca y todo, la llamó la notre dame del sur de Europa
ResponderEliminarImponente construcción a la que por cierto no entro hace años como solía. Desde que por entrar te cascan ocho euros para luego hacerse financiar el mantenimiento por fondos públicos.
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