domingo, 15 de diciembre de 2013
El horror
Postrado como un perro
molido de cansancio,
me arrastro a contemplar
mi reflejo en las aguas
profundas del estanque.
Y al ver tanta amargura
deformándome el rostro,
me alejo, pavorido
y cobarde, envidiando
la suerte de Narciso.
1 comentario:
Anónimo
17 de diciembre de 2013, 16:22
Los más bellos se extasian en los espejos...
Responder
Eliminar
Respuestas
Responder
Añadir comentario
Cargar más...
‹
›
Inicio
Ver versión web
Los más bellos se extasian en los espejos...
ResponderEliminar