La estratagema
y ahora que postrados de rodillas
tullidos nos dejaron sobre el páramo
se afanan en hallar de nuevo el modo
de hacer resucitar a la serpiente
para que acojonados olvidemos
que ellos fueron la cínica jauría
que inermes nos echó
al pie de la estampida
Siempre es así. Beso.
ResponderEliminarNo olvidaremos.
ResponderEliminarSaludos
Imposible olvidar algo así pero tus letras lo han contado mucho mejor y derraman escalofríos.Besos
ResponderEliminarEllos habitan entre nosotros y nos tienen controlados con sus bancos. Saludos poeta
ResponderEliminarMejor no olvidar y hacernos más fuertes.
ResponderEliminarMuchos besos