Ya por fin es la víspera,
Ayer me abandonó por mis heridas
La última de las gotas de mi sangre
Y hoy al fin es la víspera.
¡Me está costando tanto prepararme!
¡Es tan penoso celebrar la ausencia!
Mañana, bien temprano, llenaré
La copa de lo estéril con mis lágrimas
Y en la amarga soledad y en silencio
Brindaré sobre mi tumba por ella.
Mejor que fuera la víspera de un nacimiento, poeta, y si hay que decirle adios a algo que nos vampirea vida, sería entonces estupendo brindar...¡por esa liberación, chin chin!
ResponderEliminar¡Buen día, criaturita hipercreativa !
Llenar la copa con lágrimas uuuffff como suena eso. Yo quiero escribir como tu!!!!
ResponderEliminarBesos.
"llenare la copa de lo esteril con mis lagrimas..." que gran imagen, como me llega, ¡ojala a mi m e dejanse las arpias que me chupan la sangre!...
ResponderEliminarUn abrazo prolifico y gran poeta.
Impactante amigo Rafa. Impactante. Tanto que hasta me cuesta trabajo leerlo a estas horas del día. necesito un crepúsculo para digerirlo.
ResponderEliminarPinchito moruno, rebaná de pan y cañita de rubia fresca.
Si ayer te abandonó la última gota de sangre.... mañana, me temo, no podrás brindar por nada.... ¿sin vida puede uno elevar la copa?...
ResponderEliminarAunque,¡ en este éxodo pasan tantas cosas imposibles...! aún así, alza tu copa, poeta, por la vida, ¡siempre por la vida!
¡brindamos contigo por ella!
Un abrazo, Rafa.
¡Manda güevos las cosas que dices!
ResponderEliminarUN ABRAZO, CAMPEÓN
¿Pero bueno, y esos rayitos de luz que te trajiste "ande andan"? parece que las ausencias siguen doliendo. Una copa para mí tb , venga, va, Un beso
ResponderEliminarBueno, ya puestos te cedo algunas de mis lágrimas, si entre todos llenamos antes esa copa podrás guardarla y dedicarte a otra cosa.
ResponderEliminarMe consuela que también haya un Rafa menos triste fuera de la poesía.
Muchas gracias a todos. Colme la copa de lágrimas, la bebí y, ya veis, aquí sigo. Y es que en esto del beber me cabe de tó, jajajajaja.
ResponderEliminarAbrazos.