tictac
tictac…
Momodou
Dicen que de tuberculosis
En Kenema, Sierra Leona.
Tictac
tictac
tictac…
Soraya
De sarampión y miedo
En Yinga Alem, Etiopía.
Tictac
tictac
tictac…
Melchior
Aquejado de malaria
En Muyinga, Burundi.
Tictac
tictac
tictac…
Nehanda
Presa de un SIDA congénito
En Chipata, República de Zambia.
Tictac
tictac
tictac…
Laila
Violada en un vertedero
En Masaka, Uganda.
Tictac
tictac
tictac…
Efraín
Mermado por la disentería
En Cuilapa, Guatemala.
Tictac
tictac
tictac…
Mohandas
A manos de su amo y señor
En Madrás, República de la India.
Tictac
tictac
tictac…
Paulo Henrique
De aspirar y aspirar pegamento
En São Paulo, Brasil.
Tictac
tictac
tictac…
Badia
Bala colateral en la nuca
En Jenín, territorio ocupado de Cisjordania.
Tictac
tictac
tictac…
Fátima
Su pie, menudo y descalzo, volado por una mina
En los alrededores de Kandahar, Afganistán.
Tictac
tictac
tictac…
María
De neumonía previsible
En Benguela, Angola.
Tictac
tictac
tictac…
Norodom
De hambre, hambre y más hambre
En Battambang, Camboya.
Tictac
tictac
tictac…
Irina
De desamparo y frío
En Moscú, Federación Rusa.
Tictac
tictac
tictac…
Mohammad
De la más inmensa de las miserias
En Tessaoua, República del Níger.
Tictac
tictac
tictac…
Hassan
Carcomido de moscas
En Jendele, Isla de Zanzíbar.
Tictac
tictac
tictac…
Amina
Por lamer una granada abandonada
En Basora, Protectorado de Iraq.
Tictac
tictac
tictac…
En Nigeria.
Tictac
tictac
tictac…
En Costa de Marfil.
Tictac
tictac
tictac…
En Pakistán, Bangladesh o Indonesia.
Tictac
tictac
tictac…
En el Congo, la China o Haití…
Tic…
tac.
A cada tres segundos
En cualquier lugar del mundo
-también, por qué no
Los Ángeles o Barcelona-
Con la complicidad indecente
De una ignominiosa indolencia
Se inicia la cuenta atrás
De una nueva muerte prematura.
Tic…
tac.
Mientras tanto
Los grandes gerifaltes
Traficantes de desdichas que se ciernen
Sobre los tristes despojos
De una niñez de tercera
Hipócritas y solemnes se congregan
En los altares del despilfarro
Y tras arduas deliberaciones
Como solución prodigiosa
Terminan por designar
A una estrella del deporte
Embajador contra el hambre
Gran protector de la infancia
Cónsul frente a la miseria…
Tictac
tictac
tictac…
Tictac
tictac
tictac…
Tictac
tictac
tictac…
Tic…
tac.
24 de agosto de 2006
Y el reloj impasible va marcando el tic tac de la miseria, el tic tac de la injusticia, el tic tac de la guerra. Precioso y triste,Rafa. Un beso.
ResponderEliminarRafa, luego hay quienes dicen que la poesía no tiene valor alguno. Será porque no cotiza en bolsa ¡digo yo!
ResponderEliminarUN ABRAZO TRISTE
Rafa, me gustó mucho. Ayudar a otros a tomar conciencia de estas cosas es difícil y tú lo has hecho de una manera increíble. Sabes que yo también velo por esto.
ResponderEliminarCreo que es justamente función de la poesía ver esta parte del mundo y movilizar a quienes ni lo piensan.
Te acompaño en este camino. Beso