muchas, muchas cosas no las elegimos, pobres y engreidos humanos, que nos suponemos capaces de un "libre" albedrío...
Muchas cosas nos eligen ellas a nosotros, nosotros estábamos ahí, ellas llegan y ...se instalan, somos libres, claro, de "arrojarlas" fuera aunque ello ya no sea posible
Circe, a veces, cuando no es posible arrojar una parte, o la dejamos que siga rumiando en lo adentro, o lo arrojamos todo por la borda. A pesar del relato, seguiremos rumiando.
Creo que con el tiempo se alegrará de haberla conocido por lo vivo que le hizo sentirse. El llanto también es una expresión de vida, por lo menos en los paritorios.
¡OJALA ME HUBIERAS QUERIDO!
ResponderEliminarle dijo después de que la despachara. PAQUITA
¿Y por qué?, si todavía me quieres
ResponderEliminarmuchas, muchas cosas no las elegimos, pobres y engreidos humanos, que nos suponemos capaces de un "libre" albedrío...
ResponderEliminarMuchas cosas nos eligen ellas a nosotros, nosotros estábamos ahí, ellas llegan y ...se instalan,
somos libres, claro, de "arrojarlas" fuera aunque ello ya no sea posible
Buena versión, Paquita, me gusta.
ResponderEliminarLarrey, por eso, porque aún la quería.
Circe, a veces, cuando no es posible arrojar una parte, o la dejamos que siga rumiando en lo adentro, o lo arrojamos todo por la borda. A pesar del relato, seguiremos rumiando.
Abrazos
Creo que con el tiempo se alegrará de haberla conocido por lo vivo que le hizo sentirse. El llanto también es una expresión de vida, por lo menos en los paritorios.
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