"Yo de dinero no hablo, y menos con una mujer".
Enrique Cerezo, machirulo de pro.
"Los métodos y medios no pueden separarse del objetivo final".
Emma Goldman.
Una vez que la RAE
suprima para siempre
el género en la lengua de Cervantes
y sus muchos apócrifos
—"que no es locura ni utopía,
sino justicia"— aún
nos quedará pendiente la difícil tarea
de erradicar de todas
las bocas gula y hambre,
desterrando por siempre,
de mentes y vocabulario, el "mío"
el "tuyo", el "suyo" y otros
pronombres posesivos,
exceptuando un "nuestro"
que nos englobe a todos.
(Aunque, ahora que lo pienso
con más detenimiento,
tal vez para ambos logros
sea condición el triunfo previo
de una revolución
anarcocomunista.)
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