Ella bajó del cielo negro en un relámpago. Cantaba en un idioma extraño, semejante al silencio. Yo no entendía nada, pero era hermoso. Se esfumó antes del trueno. Nunca habrá de volver. No importa. Desde entonces la espero, escribiendo poemas que no entiendo.
¿SERÁ LA DIOSA ESCANDINAVA DEL TRUENO?
ResponderEliminarbueno, y de lo tuyo, qué, después del desplome