Toallas y sombrillas
rojigualdas al son
del cara al sol y al sol
de la Una, Grande y Libre,
han brotado lo mismo
que setas venenosas
en la playa de Arenys
de Mar. Una legión
caudal de escarabajos
peloteros ha puesto
cerco a tan patriotera
bravata de inmediato
y allí están desde entonces
fabricando a destajo
sus bolitas de mierda.
Te recuerdo que los independentistas han llenado previamente de cruces amarillas estas playas. nacionalistas españoles fanatizando contra catalanistas a ver quíen es más burro
ResponderEliminarLa diferencia está en que con las cruces amarillas se reivindica algo justo, la liberación de unos señores que, tras los diversos pronunciamientos que han tenido lugar por parte de la justicia de varios países europeos, son, sin ya lugar a duda alguna,presos políticos (como lo son también los jóvenes de Altsasu), en tanto que los de las sombrillas muy españolas y mucho españolas vienen a expresar la nostalgia por unos tiempos que ya deberían estar enterrados para siempre en las catacumbas de la historia. No comulgo ni con unos ni con otros (aunque también soy de los que reivindican la liberación de los citados presos), pero, como no tomar partido suele suponer tomarlo por la peor de las opciones, lo tomo por los de las cruces.
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