Utilizo en mis versos material de derribo. Al cabo la belleza resultó una cuestión baladí. Lo importante es ir desescombrando parcelas de este erial de ayer e invierno. Por si otra primavera.
Siempre hay una razón para derribar, además una larguísima tradición de derribos y destrucción recorre la historia del hombre. Siempre ha sido más fácil la destrucción que la construcción y ya se sabe, el ser humano va a lo fácil, la vagancia y la barbarie nos acompañan. Las razones son de cualquier signo, basta con una piqueta o un argumento florido para que cualquier descerebrado emprenda a trancazos contra todo lo que está en pie. La intolerancia y el fanatismo acompañan al martillo. Salud Francesc Cornadó
Siempre hay una razón para derribar, además una larguísima tradición de derribos y destrucción recorre la historia del hombre.
ResponderEliminarSiempre ha sido más fácil la destrucción que la construcción y ya se sabe, el ser humano va a lo fácil, la vagancia y la barbarie nos acompañan.
Las razones son de cualquier signo, basta con una piqueta o un argumento florido para que cualquier descerebrado emprenda a trancazos contra todo lo que está en pie.
La intolerancia y el fanatismo acompañan al martillo.
Salud
Francesc Cornadó
No derribes todo, construye con tus recuerdos el sentido de tu vida
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